jueves, 13 de abril de 2017

El Collado - La Rioja

Realmente está catalogada como despoblada, pero yo os tengo que decir que cada vez que he ido, siempre he visto a alguien. La primera vez, era en pleno invierno, recorrimos el pueblo, pensando que allí no vivía nadie, y cuando ya estábamos metidos en nuestro coche y a punto de marcharnos, vimos que de una casa salía una señora, le saludamos con la mano, y nos fuimos sin decirle nada.
Las otras veces ha sido en primavera o verano, y entonces ya hemos visto a más gente. De hecho esta última vez se veía mucho movimiento, casualmente coincidimos con el día en que los vecinos estaban limpiando de malas hiervas todas las calles del pueblo.
El Collado está situado a 1085 metros de altitud. pertenece al municipio de Santa Engracia de Jubera, 18 kilómetros les separan.
El pueblo quedó despoblado en el año 1960
Como os he comentado, no me encontraba sola recorriendo sus calles, además de algún vecino, también me encontré con alguna que otra mascota.
Justo cuando me encontraba fotografiando las ruinas de la  iglesia de San Juan Bautista, apareció por allí Lucia, una de sus vecinas. Creo que era la misma señora que vi la vez anterior.
Esta vez si que nos saludamos y me contó y mostró algunas cosas del pueblo. De la iglesia me dijo que han tenido que poner esta reja, para evitar que entren a saquearla. De hecho me dijo que cuando el pueblo estuvo vacío, alguien rompió la puerta que había en su interior para quitarle los clavos para vendérselos a unos anticuarios y, que las dos campanas que había en cada una de las espadañas, que según ella se oían desde Arnedo, también las quitaron para fundir .
Bastante disgustada me decía que toda la culpa era del arzobispado que no se hacía cargo de nada y que dejan todo abandonado.
Muy ilusionada me mostró este nuevo refugio, que lo utilizan para reunirse y pasar su tiempo de ocio,  jugando alguna partida de dominó o de cartas.
Lo han construido en lo que antes fue su antigua escuela, que era la única de la zona, y que los niños no acudían en días de nieve.  Ella abandonó el pueblo cuando la escuela desapareció, por sus palabras deduje que igual ella fue la maestra del pueblo.
También me llevó a su casa para mostrarme el horno de pan. La verdad es que se sentía muy orgullosa de todas las mejoras que se están haciendo en El Collado.
Aunque vi farolas en sus calles, no creo que tengan luz eléctrica, creo que la energía la obtienen de las placas solares que también  vi en sus tejados
También contaban con dos ermitas, que actualmente de ellas tan sólo quedan sus ruinas. La de el santo Cristo y la de Santa Elena.
Dejamos El Collado para ir en busca de Buzarra otro despoblado.

(La Rioja de la A a la Z)

El Bardal - Aldeanueva de Santa Cruz

El Bardal es un despoblado perteneciente al término municipal de Aldeanueva de Santa Cruz, en Ávila (antes Salamanca), cuyos habitantes lo abandonaron, tal vez por su situación aislada, para trasladarse a las cercanas poblaciones de Los Cuartos o Aldeanueva.
En la actualidad todavía está en uso alguno de sus pajares, que los ganaderos aprovechan como almacén de aperos de labranza y ganado. Ubicado en un hermoso paisaje, puede imaginarse aun hoy el trazado de sus calles, ahora cubiertas de zarzales.
Según el libro "Fisiografía e Historia del Barco de Ávila", publicado por Nicolas de la Fuente, El Bardal contaba en 1925 con 45 habitantes. 
Actualmente se puede llegar a la población por caminos transitables a pie desde Los Cuartos o Aldeanueva.

(Donde duerme el olvido)

Estación de Aranjuez - Madrid

En la famosa estación de ferrocarril de Aranjuez, podemos todavía observar la decadencia de la misma y lo que fue.
Aquella tarde, lejos de los turistas y anónimas personas, con la vista perdida en los andenes; paseábamos entre los viejos vagones de mercancías.
Buscábamos esa otra estampa en la vieja estación.
En el interior de los muelles de carga solo quedaban los rótulos de los destinos de la mercancía pintados en la pared. Ventanas tapiadas, para proteger su decadencia de ojos extraños.
En la aislada caseta del guarda de agujas, solo sus vencidas ventanas mordían el viento al paso entre sus cristales.
Su oxidada maquinaria no sabía muy bien cuál sería su definitivo destino.
Frio, lúgubre, atravesado por algún halo de luz, la alfombra de papel invitaba a no hacer ruido en la sala de espera.
Fuera toneladas de hierro inmóvil, recuerdo de quien llevo la prosperidad a otras tierras, ahora lienzo para la vergüenza de quien escribe en sus cuerpos agonizantes.
Y allí quedaron despidiendo al horizonte los que todavía moraban cuidando el olvido de aquella bonita Estación.

Cervera de la Cañada - Zaragoza

La disposición de vías era idéntica a la de su colateral exceptuando que las dos vías del muelle estaban unidas entre si.
Al parecer el clima o la orografía de la zona no resultan lo suficientemente propicios para que particular alguno se haya interesado por los edificios, así que de nuevo tenemos una estación en ruinas.
La caseta de los aseos y el muelle cubierto tampoco presentan un mejor aspecto.

(Esperando al tren)

Estación de Alocén - Guadalajara

Para hacer el embalse de Entrepeñas se anegaron muchos huertos ,así como la estación de ferrocarril que conectaba Alocén con Madrid en la línea del ferrocarril del Tajuña.
Con la pérdida del ferrocarril y el éxodo rural de los años 1960, Alocén se convirtió en un pequeño pueblo casi deshabitado en invierno y donde muchas familias tienen su segunda residencia en verano.
Actualmente, ya no posee colegio ni instituto, ni farmacia, centro médico u otros servicios, para los que depende de Budia.

(Wikipedia)