martes, 29 de noviembre de 2016

Pardamaza - León

El camino que lleva a Pardamaza, cubierto por unos castaños centenarios que apenas filtran el paso de la luz, predispone al viajero a dejarse cautivar por el bello paisaje boscoso que rodea esta localidad, desierta buena parte del año.
Sólo las paredes intactas del recoleto cementerio, la estampa de la cuidada iglesia de piedra, con su espadaña coronada por el campanario, y numerosas casas convertidas en segundas residencias, demuestra que los vecinos, descendientes de los antiguos habitantes, no están dispuestos a abandonar por completo el pueblo. De hecho todos los años a mediados de agosto celebran tenazmente sus fiestas patronales, con procesiones y una pequeña orquesta que tiñen el aire de bullicio y melancolía.
El pueblo, formado por más de 30 casas, durante el siglo XIX llegó a contar con ciento veinte habitantes que vivían de la ganadería, el cultivo de lino y centeno y la caza de jabalíes, faisanes e incluso osos, que todavía frecuentan una zona de brañas situada a 10 kilómetros del pueblo.

Caldo de castañas
En épocas de escasez, las castañas también formaron parte de la alimentación de muchos vecinos, que las guisaban con patatas haciendo una especie de caldo, las cocían con leche o las asaban utilizando un rudimentario tambor de hierro. Las paradojas del destino han querido que aquellas mismas castañas, que "quitaron mucha hambre en la posguerra", según un veterano vecino del pueblo, hoy se coticen por su calidad y acaben envasadas en licor por una conocida marca de alimentos artesanos de Cacabelos.


(Pilar Alonso y Alberto Gil)

Estación de Fosado - La Coruña

La estación de Fosado fue inaugurada en el año 2003, después de la modificación de la línea ferroviaria Zamora-A Coruña a su paso por Ordes. Se localiza en el km. 401.323 de esta línea. Debido al nuevo trazado se construyó la nueva estación a más de 5 km de la villa de Ordes. Si la antigua ya quedaba un poco a desmano la nueva se lleva la palma y por ello su uso hoy es prácticamente nulo asemejándose a una estación fantasma.

(Galicia máxica)