viernes, 4 de noviembre de 2016

Cardiel - Huesca

Monegros en su día fue un bosque de pinos y de sabias que le dieron el color oscuro y el nombre de montes negros. Su transformación en el paisaje desértico actual se debe a la tala indiscriminada que se llevó a cabo para construir naves para la Armada cuando éstas se realizaban de madera, también para las carboneras.
Los llanos de Cardiel caracterizan a esta zona semidesértica de la estepa monegrina, las extensas planicies en las que destacan relieves aislados en forma de mesas y cerros cónicos.
En medio de este paraje se levanta el poblado de Cardiel, conjunto de casas de piedra y adobe entre las cuales destaca la Ermita. Cercano al poblado discurre lo que antaño fue la calzada romana que unía Tarraco y Caesar Augusta y posteriormente paso a utilizarse como camino real. A la vera de éste se alzaba una cruz románica con capitel esculpido que en la actualidad se conserva en el Palacio Montcada.
Fue una aldea muy importante en la edad media cuando se edificó la Iglesia de San Salvador, reconstruida hoy en día. Parece que algunas de las construcciones siguen siendo utilizadas o por lo menos, están rehabilitadas.
Los llanos de Cardiel forma parte de la Zona de Especial Protección en Aves, por estar presentes colonias de cernícalos primilla, una pequeña ave rapaz que tiene vuelo característico cuando se dispone a cazar a los roedores o insectos de los que se alimenta.

(Pueblos del olvido)